La habilidad de las organizaciones para potenciar, modificar y adaptar sus atributos al entorno ha sido un tema estudiado por grandes teóricos de los negocios y la economía, entre esos Birger Wernerfelt y Paul Schoemaker, quienes han enfatizado en que los recursos y las capacidades propias son fuentes de ventajas competitivas en el mercado.

Bajo esa premisa, la Universidad Simón Bolívar cuenta con dos nuevos laboratorios de Materiales y Electrónica, que cumplirán una doble función: por un lado, fortalecer la formación de estudiantes de los programas de ingenierías y Diseño Industrial; y por otro, ampliar el portafolio de servicios del centro de crecimiento empresarial, MacondoLab, para atender más proyectos de la industria 4.0 (inteligencia artificial, internet de las cosas, big data y robótica).

Para Paola Amar Sepúlveda, vicerrectora de Investigación e Innovación de Unisimón y CEO de MacondoLab, el objetivo es ir al ritmo del cambio tecnológico y su impacto en el mundo.

“Para nosotros no significa una compra de infraestructura, sino preparar a profesionales capaces de competir en un mercado que cambia muy rápido”, dice.

Los dos nuevos espacios refuerzan el ecosistema de CoLabs de Unisimón y MacondoLab, que en conjunto ya disponían de tres laboratorios: Simulación Molecular y Bioinformática, Prototipado, y Genética y Biología Molecular, los cuales trabajan de manera independiente o integrada, según la necesidad del cliente o la iniciativa.

Además del componente académico, los recintos y sus equipos de última generación respaldan las horas de trabajo científico de 21 investigadores que en MacondoLab reciben la demanda de empresarios interesados en desarrollos y pilares tecnológicos de la Industria 4.0, aplicados la mayoría a los sectores Salud, Naval, Ambiental, Energético y Naranja.

Asertividad en el mercado
El Laboratorio de Simulación Molecular y Bioinformática posee una central con no menos de 25.000 núcleos de procesamiento, capacidad que permite llevar a cabo análisis con posible trascendencia para la salud. Uno de los más importantes es la búsqueda de un tratamiento contra el cáncer alternativo a la quimioterapia y la radioterapia, por medio del estudio de compuestos vegetales que, mediante simulación, demuestren que pueden inhibir la proteína HSP90 que ayuda a la proliferación de células tumorales.

En cuanto al nuevo Laboratorio de Electrónica, su constitución también obedece a que Unisimón amplió la oferta de su facultad de Ingeniería con seis nuevos programas: Multimedia, Mecatrónica, Biomédica, Civil y Mecánica, junto con Diseño Industrial.

“Cuenta con equipos que nos ayudan al proceso de enseñanza de asignaturas y, al mismo tiempo, complementa las labores del Laboratorio de Prototipado en el diseño, prueba y elaboración de tarjetas electrónicas”, explica Carlos Ochoa Pertuz, director del programa de Ingeniería Mecatrónica. “.

La utilidad de los CoLabs se refleja en proyectos como PATRii, presentado al público en enero de este año y surgido de la alianza de MacondoLab y la Clínica Oftalmológica del Caribe, con financiación de Colciencias y el MinTic.

Para la creación de PATRii, expertos de los laboratorios de Prototipado y de Simulación Molecular y Bioinformática idearon un algoritmo robusto que procesa el documento en PDF con los datos del examen visual, al igual que el software que se alimenta de dicha secuencia y su interfaz.

El resultado de ese trabajo fue una plataforma de inteligencia artificial pionera en el mundo que, en menor tiempo, interpreta exámenes de campo visual y facilita la detección de enfermedades oculares, en especial el glaucoma.

“PATRii es uno de los cuatro productos que hemos desarrollado y tienen más de 98% de exactitud, por eso ya están en el mercado con propuestas de fabricantes para incluirlos en sus maquinarias”, destaca Reynaldo Villarreal González, director del Laboratorio de Prototipado.